La UNED, en la Antártida

02/02/2024



Antonio Fernández Fernández, profesor y director del Departamento de Geografía de la UNED, forma parte del Proyecto PARANTAR, un equipo de científicos de distintos países liderados desde la Universidad de Oviedo por Jesús Ruiz Fernández y que se encuentra actualmente en la Antártida estudiando los procesos de deglaciación y respuesta paraglaciar –eventos acontecidos tras la retirada de un glaciar- en las Islas Shetland del Sur. Para la mayoría de los investigadores del grupo se trata de la segunda campaña realizada dentro del proyecto. Los participantes zarparon a mediados de enero en el buque Bio Hespérides y, una semana después, comenzaron los trabajos en la zona.

 

 

Precisamente desde allí, Lidia Ferri, de la Universidad de Oviedo, y nuestro profesor, nos ponen al día de los avances de la campaña, cuyo objetivo es reconstruir temporal y espacialmente el proceso de deglaciación del archipiélago de las Shetland del Sur (Antártida Marítima) desde el Último Máximo Glaciar global, así como estudiar la respuesta paraglaciar de las áreas libres de hielo generadas a distintas escalas temporales. El estudio de estos procesos de retroceso de masas glaciares es fundamental debido a sus repercusiones a distintas escalas, desde la local a la planetaria. Efectos como la subida del nivel del mar o la llegada de fauna a los espacios deglaciados están directamente relacionados con los cambios geológicos estudiados por PARANTAR, además del desencadenamiento de movimientos en masa rápidos, los procesos erosivos con la consecuente movilización de partículas que van a parar al mar, o la formación y degradación del permafrost.

 

Tras la llegada y puesta en marcha de los equipos de trabajo, los seis integrantes de PARANTAR que forman parte de esta segunda campaña han comenzado los trabajos de campo. En Punta Barnard, una península cercana a la península Hurd en la que se localiza la base científica española, “medimos los desplazamientos que se han producido año a año en una serie de cantos que llevan implantados unos sensores de radiofrecuencia. Medimos su posición actual con un GPS diferencial para ver el desplazamiento. Esta tarea la realizamos en tres niveles diferentes de la ladera elegida, a diferentes alturas, para ver si se observan patrones diferentes”, nos cuentan desde allí.

 

“También debemos hacer el mantenimiento de las cámaras fotográficas que tomaron fotos diarias durante todo un año para ver la evolución y dinámica de la cobertura de nieve, posible caída de rocas o avalanchas y ver desplazamiento de la ladera; realizamos el mantenimiento y descarga de datos de las estaciones de temperatura y hacemos vuelos con el dron para obtener fotos aéreas y desarrollar a posteriori un modelado del terreno.  Este material es una base fundamental para nuestros estudios”, explican los investigadores.

 

 

De esta forma, y a lo largo de las tres campañas de trabajo de campo del proyecto, el patrón espaciotemporal de la deglaciación (y sus avances y retrocesos asociados) será estudiado en tres áreas deglaciadas de la Isla Livingston (Punta Elefante, Punta Hannah y extremo sur de la Península Hurd), así como en las islas Snow, Media Luna, Robert, Nelson, Esperanto y Dee. El proyecto cuenta con un potente equipo multidisciplicar que aglutina investigadoras e investigadores consolidados con gran experiencia en el estudio de regiones polares, algunos de los cuales lideran prestigiosos laboratorios de isótopos cosmogénicos y de OSL con alcance internacional, así como pujantes jóvenes que dominan las técnicas más novedosas.

 

UNED


Itziar Romera

Fotografías: PARANTAR

Comunicación UNED

UNED

C/ Juan del Rosal, 14 - 28040 Madrid
comunicacion@adm.uned.es
uned.es